FinalStraw es una marca estadounidense fundada en 2018 por Emma Rose Cohen, una defensora del medioambiente con más de una década de experiencia en sostenibilidad. La idea nació como respuesta directa a la contaminación causada por plásticos de un solo uso, especialmente las pajitas, uno de los residuos más comunes en playas y océanos.

Su primer producto, la FinalStraw, fue un éxito viral: una pajita plegable de acero inoxidable con puntas de silicona, estuche compacto y cepillo de limpieza, todo pensado para llevar fácilmente en un llavero. Tras una campaña de Kickstarter que recaudó más de 1.8 millones de dólares, la marca se consolidó como un referente en innovación ecológica y diseño funcional. Además de sus icónicas pajitas, FinalStraw ha expandido su línea con otros productos reutilizables bajo el concepto "Foreverables", como cubiertos y kits portátiles, manteniéndose firme en su objetivo de eliminar los desechables. La marca combina humor, diseño inteligente y un fuerte mensaje activista para impulsar el cambio de hábitos en el consumo diario. Con millones de unidades vendidas y un impacto ambiental positivo cuantificable, FinalStraw demuestra que las pequeñas decisiones individuales pueden generar una gran diferencia colectiva. Su lema lo resume bien: “Small change, big impact.”

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